Su extraordinario acabado pulido, sus texturas naturales, variedad y riqueza cromática son sólo algunas de las ventajas del mármol que le han hecho uno de los materiales preferidos por interioristas y arquitectos. La tonalidad del mármol se mantiene inalterable con el paso del tiempo, sobre todo si se utiliza en interiores. Mesadas de baños, suelos y paredes interiores, mesas y escaleras, las posibilidades decorativas del mármol son tan variadas como se pueda imaginar. El resultado son ambientes cálidos que transmiten elegancia y singularidad.